+ 180 PROFESORAS
Anteayer viernes 17 de junio próximo pasado tuve la oportunidad de leer la comunicación pública que más de 180 profesoras, entre jubiladas y activas, asociadas al Instituto de Previsión y Ahorros del Personal Docente y de Investigación (IPAPEDI) de la Universidad de Carabobo, enviaron al actual consejo de administración con copia a la Superintendencia de Cajas de Ahorro (SUDECA).
Confieso que me despertó curiosidad y
sorprendió gratamente, que la comunicación aludida haya sido una manifestación de voluntades emanadas exclusivamente de profesoras. Esencialmente, cuando se lee, lo que se hace es escuchar mirando. Ciertamente mientras leía sentía la sensación de estar escuchando a más de ciento ochenta profesoras, que de manera “unívoca, libérrima y concurrente” expresaban su voluntad y talante democrático de solicitar elecciones en IPAPEDI, en ejercicio pleno de su independencia y libertad como ciudadanas y profesoras universitarias.
La fecha de la comunicación referida es del 17 de junio de 2022, justo el día en que se agotaron los tres (3) años de haberse llevado a cabo el último proceso electoral (17/06/19) en IPAPEDI, donde resultó electa la actual administración. Percibí la carta de solicitud de elecciones de las profesoras como un viento fresco; una especie de trueno clamoroso de anhelos que se sienten burlados, y que reclaman un imperativo ejercicio pedagógico y de ciudadanía democrática, al pedir elecciones.
La iniciativa de las profesoras de solicitar
comicios, viene a ratificar la validez de aquel aserto que todavía sirve de guía a la hora de expresar la inconformidad por el exceso de decir y no hacer (rex non verba). El viernes pasado más de ciento ochenta profesoras dijeron, como en la Roma eterna, que la diferencia entre lo que se dice y lo que se es, es lo que se hace: hechos, no
palabras.
El acto de didáctica ciudadana que ejercieron las más de ciento ochenta profesoras UCistas, ratifica la esperanza y la fe de que las cosas pueden cambiar en nuestro instituto. Con voz firme y clara, expresaron su derecho a ser escuchadas mediante la pertinente consulta electoral que permita decidir sobre la orientación del liderazgo que amerita el instituto de previsión y ahorro, institución que pertenece al conjunto de todos los profesores que sean asociados. A nadie más.
La importancia del acto de solicitud de elecciones es medular, en tanto y en cuanto, establece la decisión primaria para cambiar las cosas, ante lo que la mayoría del profesorado sostiene en convicción: es menester que se expliquen muchas cosas que ocurren y han ocurrido bajo la égida de la actual junta directiva en cuanto al manejo de nuestros ahorros.
Es necesario, por ejemplo, explicar porqué se ha perdido el norte del IPAPEDI de todos, al derivar nuestros ahorros en inversiones que amenazan en convertirse en un elefante blanco, que hemos denunciado, una y mil veces, como ocurre con la mole inconclusa de “bloque, cabilla y cemento” de Chichiriviche.
Es menester explicar porqué, ante tantas necesidades de los profesores, se haya preferido desviar nuestros ahorros hacia esa obra, dejando a un lado la atención a necesidades apremiantes que golpean a diario a los profesores en materia social y de manera insensible se haya dejado de pagar dividendos desde hace tres años, imposibilitado retirar haberes y cerrar la cartera crediticia del instituto, que otrora tanto ayudaba en resolver algunas de las penurias que
padecemos los profesores.
Profesora, profesor, en IPAPEDI tenemos dos caminos: el continuismo o el cambio.
¡Por el cambio vamos!
¡Sabemos cómo hacerlo y sin excusas!