OPERACIÓN ESQUILMAR

OPERACIÓN ESQUILMAR

El domingo pasado hice pública la crónica intitulada: IPAPEDI: Problemas y Soluciones. En dicho artículo desvelé el carácter engañoso e insidioso que lleva en su seno la “póliza de salud” que presenta el trípode de la asociación estratégica conformada por Ipapedi-CoberGroup-Seguros Caracas, y que es ofrecida al profesorado UCista. Se deshizo así el maquillaje manipulador y el antifaz mediático, dejando al descubierto que casi el 50% de la “cobertura” ofrecida ($21500) está destinada al amparo de eventos de Covid y de Maternidad ($8000 + $2000), cuya probabilidad de ocurrencia es evidentemente muy baja.
En IPAPEDI: OPERACIÓN ESQUILMAR insisto en colocar en evidencia, nuevamente, la perversa y reiterada intención de seguir esquilmando el bolsillo de los profesores, aprovechándose de modo descarado, grotesco y hasta criminal de la precaria y dolorosa situación económica que nos embarga, ya por todos conocida.
El pasado miércoles 19 del corriente, un compañero profesor de mi Facultad de Ingeniería me remitió una propuesta de la Secretaría de la Universidad del Zulia denominada Plan de Salud Integral, a los fines de que la comparara con la Póliza de Salud que oferta el IPAPEDI, por el conducto del antes mencionado “triunvirato estratégico” del cual forma parte. Ese mismo día, me comuniqué con la empresa MediPlus y le formulé algunas preguntas relativas al condicionado que tiene lugar en el acuerdo que conviene con LUZ y que ejecutaría a través del Centro Clínico Los Olivos.
Básicamente, me enfoqué en hacer dos (2) preguntas. A saber: 1. ¿En los planes propuestos aplica lo relativo al plazo de espera? La respuesta fue clara y categórica: NO aplica el plazo de espera. 2. ¿Se reconocen y aceptan las enfermedades preexistentes para efectos de aplicación de un determinado plan? La respuesta fue, NO se aceptan ni reconocen las patologías preexistentes. No obstante, agregó el representante de dicha empresa: si el número de afiliados al plan respectivo es mayor a 100, Sí se reconocería y se aceptaría la preexistencia de enfermedades.
Es importante aclarar y diferenciar lo que significa ser titular del plan o ser afiliado al plan. Me explico: si un profesor o profesora adquiere un plan determinado, se convierte en titular, y si su grupo familiar integrado, por ejemplo, por su cónyuge, dos descendientes (hijos), un ascendiente (padre) y se les incluye, entonces, existen cinco (5) afiliados. Significa que sería suficiente con que se reúnan 20 docentes con grupo familiar como el del ejemplo, para que se desaplique la mencionada restricción del no reconocimiento de la preexistencia de enfermedades.

Seguidamente copio y pego los flyers de LUZ e IPAPEDI para que cada uno de ustedes compare y juzgue.

Me permito hacer un ejercicio de comparación. Asumamos que un profesor esté en el grupo etario de (50-59) años. Según la oferta Ipapedi, él debería pagar $293,65 por trimestre para tener derecho a una “cobertura” de $21500. Lo anterior equivale a que dicho profesor tendría que pagar una prima anual de $1174,6. Si ahora vemos la oferta de LUZ observamos que el costo de la prima no depende del grupo etario. Para todos los afiliados el costo es de $25 mensuales, o sea, $300 anuales, pero con cobertura de $40000 si el plan escogido es el Integral Ampliado LUZ II. Una simple y superficial inspección nos conduce a concluir que la oferta de LUZ casi duplica el monto de la cobertura ($40000 contra $21500), y que el costo de la prima anual es casi la cuarta parte de lo que monta la de Ipapedi ($300 contra $1174,6). Téngase presente que el monto de prima a pagar (según la oferta de Ipapedi) es de $1174,6 por profesor.
Proyectemos el monto a pagar por grupo familiar y sencillamente concluiremos que resulta imposible que los docentes podamos financiar tales montos.
Profesor(a), lo anterior me conduce a pensar y a señalar que desde Ipapedi, en la misma línea del gobierno que pulverizó nuestro bono vacacional, han puesto en marcha la operación esquilmar en claro detrimento del estamento profesoral UCista. Rechazo totalmente tal pretensión por ser desleal y por traicionar al gentilicio y orgullo de ser universitarios.
Frente a la trágica evidencia del modelo polizario de Ipapedi, al que he mostrado como inviable para la gran mayoría de docentes, que no pueden sufragar una póliza tan costosa, afirmo nuestra reiterada y perseverante propuesta alternativa a dicho modelo que es el Ecosistema Sanitario Autónomo (ESA), el que incluye a la Unidad de Cirugía Ambulatoria (UCA), que sin desembolso dinerario por parte del profesor(a), resolvería, entre otros problemas, más del 80% de las cirugías requeridas.
ESA es un ecosistema fundamentado en la sinergia interinstitucional e intercooperacional de diversas instancias preocupadas y ocupadas por el tema de salud, y en el que nuestras prestigiosas facultades de Ciencias de la Salud y Odontología ocuparían el papel histórico y preponderante que les corresponde asumir, en un esfuerzo mancomunado que devuelva la dignidad en el trato al docente universitario, ante la insoslayable vulnerabilidad y absolutamente prioritaria necesidad de atender la gravedad de una enfermedad.

¡Sabemos cómo hacerlo y sin excusas! ¡Elecciones YA!