Seguro HCM UC

En las dos últimas entregas de “Ingeniería Política” he tratado los asuntos del Montepío Funerario y la Seguridad Social UC.
En la crónica del Montepío Funerario, puse de manifiesto que con un fondo de 30000$ anuales se podrían financiar los gastos mortuorios si fallecieran en un año 60 profesores y/o familiares a razón de un costo promedio de 500$ por cada servicio.

Mi intención, sencillamente, fue la de demostrar que, por lo menos, resulta incomprensible e inaceptable que a los 2690 profesores de la UC, quienes vivimos una tragedia existencial como la que nos agobia, se nos convoque a pagar 45$ de contado o 50$ a crédito a una empresa de seguros por concepto de póliza de seguro funerario.

El aporte de 50$ por parte de cada uno de los 2690 profesores, equivalen a 134500$ anuales. Eso significa, que la ganancia neta de la empresa en cuestión estaría en el orden de 104500$ a costa de los depauperados sueldos de los miembros del personal docente de mi UC.
50$ representan “20 meses del sueldo base de un profesor titular a dedicación exclusiva” quien, por cierto, es menester destacar, es el docente que devenga el más alto sueldo en la universidad.
Plantear y dar a conocer una propuesta para intentar liberar a los profesores de esa pesada carga financiera, no es estar en contra de algo; es testimoniar ser solidario con quienes probadamente requieren de solidaridad practicada y no tanto de solidaridad predicada.

La diferencia entre lo que se dice y lo que se es, es lo que se hace.
En la crónica de Seguridad Social UC, procuré hacer un somero relato del devenir histórico del asunto de marras en nuestra Alma Mater. Vale decir, traté de responder tres interrogantes:
De dónde venimos? Dónde estamos? Hacia dónde vamos?
Quise probar con base en datos y testimonios testificados, que si graficamos el índice de la seguridad social en función del tiempo, incontrovertiblemente, apreciaríamos una expresión gráfica con pendiente negativa. La pendiente negativa de la expresión gráfica de la seguridad social en función del tiempo, se  interpreta como que el índice de dicha seguridad social disminuye con el pasar del tiempo.

La presente crónica, intitulada Seguro HCM UC, la abordo desde una perspectiva basada en datos.
Me propongo dirigir el foco de atención en lo que tenemos en la actualidad y en lo que queremos en materia atinente a servicios HCM y funerario, pero con datos.
No es lo mismo tomar decisiones trascendentes e importantes con base en “opiniones” que hacerlo con apego a datos.
Todos los miembros de la comunidad universitaria sabemos, y sobre todo sentimos, la dramática y triste realidad que en mala hora nos ha tocado vivir.
Actualmente, nuestros compañeros empleados y obreros no tienen seguro de HCM que los ampare ante un evento que amerite hospitalización. Esta realidad nos debe preocupar, inspirar y motivar a los fines de que nos ocupemos y demos respuesta a esa indeseada realidad.

En el presente, los profesores tenemos una póliza de seguro HCM y APS que funciona conforme lo describo a continuación.
En el primer nivel, una póliza básica por un monto de 300$ para HCM y 150$ para APS contratada por Ipapedi con Seguros Caracas.
En el segundo nivel, una póliza complementaria contratada por Fopediuc con Pirámide de Seguros. Esta póliza funge como un “puente” con cubertura de 586$ para HCM y 140$ para APS.

Los 140$ de APS se aplican con independencia de los 586$ para HCM y no reducen esta cobertura en caso de que haya necesidad de utilizarla.
El tercer nivel, es la póliza de contingencia contratada por Ipapedi, también con Seguros Caracas, y posee una cobertura por asegurado de 1300$.
Es decir, los profesores, individualmente, tenemos un seguro HCM cuya cobertura es de: 300$+586$+1300$=2186$.

Los datos anteriores son la expresión de la realidad con la que contamos los profesores de la UC en materia de seguro HCM.
Asi, entonces, queda claro que los docentes UCistas titulares de la póliza y sus respectivos grupos familiares declarados y registrados, podemos contar con una cobertura de hasta 2186$ de seguro HCM contratado por Ipapedi y Fopediuc en la modalidad que lo rige.

Ahora bien, surge la pregunta:

Cuánto es el monto dinerario que un profesor pagó en 2020 por esa modalidad y forma de contratación?

La respuesta la proporciono usando el principio de superposición (suma) del costo de cada uno de los tres niveles descritos anteriormente.
El primer y tercer nivel, casi en su totalidad, lo paga el profesor. Significa que el profesor financia el 80% de su prima personal y el 100% de la prima de su grupo familiar (cónyuge, padres e hijos menores de 25 años según sea su caso).
El segundo nivel lo financia “100% Fopediuc”, que equivale a decir; el profesor no hace ningún desembolso.
Eso es lo que tenemos y cada quien sabe, en consecuencia, lo que le costó el HCM y el seguro funerario en 2020 y, por lo tanto, puede estimar con base en la expectativa híperinflacionaria, cuánto tendría que pagar en 2021.

Que queremos?
En materia de contratación de póliza HCM, los profesores queremos, aspiramos y esperamos que la propuesta alternativa sustitutiva, que discuta y apruebe el CU, a lo sumo, nos cueste lo mismo que nos costó la póliza 2020 y que, además, el nivel de la cobertura sea sustantivamente mayor. Adicionalmente, que no aplique el plazo de espera; que se reconozcan las enfermedades preexistentes; que las condiciones de contratación no estén sujetas  a revisión semestralmente, sino que apliquen sin modificación a lo largo del año contratado.
Adicionalmente, anhelamos y exigimos que la póliza de HCM incluya lo relativo al seguro funerario sin costo adicional y con una cobertura mayor a la que hasta ahora hemos tenido.

Si la póliza HCM 2021 cuesta menos o a lo sumo cuesta lo que costó la del 2020; si posee una mayor cobertura e integra al servicio funerario, podríamos decir con convicción, que estaríamos desacelerando el deterioro de nuestra seguridad social.
Es importante destacar que las decisiones tienen su “timing”. El costo de una  póliza cotizada en dólares y fechada en febrero, tendría en julio un costo mayor que oscilaría entre 30 o 40%, mínimo.

Si convocamos la memoria reciente, recordaremos que cerca de 1000 profesores manifestaron dificultad para el pago del segundo semestre de la póliza 2020. En febrero de 2021 se acrecienta dicha dificultad y, por consiguiente, podríamos esperar que el nivel de esa dificultad a mediados del año en curso, aumentará.
Es decir, dejar que el tiempo pase sin tomar decisiones, sería la peor de las estrategias que se pudiera adoptar.

Queda demandado nuestro Consejo Universitario para que guiados por nuestro Dios debata las alternativas, compare y decida con base en datos lo que más convenga a los UCistas.